Las muertes infantiles relacionadas con el sueño son la principal causa (41%) de muerte para los bebés de Utah de un mes a un año. La mayoría de estas muertes se produjeron en un entorno de sueño inseguro. Colocar a los bebés boca arriba para dormir y brindarles un ambiente seguro para dormir reduce el riesgo de SMSL y de muerte por otras causas, como la asfixia.
Recomendaciones para un sueño seguro
La Academia Estadounidense de Pediatría y los Institutos Nacionales de Salud recomiendan lo siguiente para mantener seguro al bebé:
- Siempre coloque a su bebé boca arriba para dormir, para la siesta y por la noche.
- Los bebés no deben dormir en una cama para adultos, en un sofá o en una silla solos, con usted o con cualquier otra persona. El lugar más seguro para su bebé es su habitación, pero en un área para dormir separada, como una cuna. Esto también ayudará con la lactancia, que se ha demostrado que reduce el riesgo de SMSL.
- Utilice una superficie firme para dormir. Los colchones deben ser una cuna de seguridad aprobada, cubiertos solo con una sábana de cuna ajustada.
- No use almohadas, mantas o protectores de cuna en ningún lugar del área donde duerme su bebé. Esto reduce el riesgo de SMSL, asfixia, atrapamiento y estrangulamiento.
- Mantenga los objetos blandos, los juguetes y la ropa de cama suelta fuera del área donde duerme su bebé.
- No fumar o dejar que alguien fume cerca de su bebé.
- Vista a su bebé con ropa ligera para dormir, como una pijama de una pieza, y no use una manta. Esto ayudará a su bebé a evitar el sobrecalentamiento.
- Considere darle a su bebé un chupete que no esté sujeto a una cuerda para las siestas y por la noche para reducir el riesgo de SMSL.
- No utilice dispositivos comerciales comercializados para reducir el riesgo de SMSL, como cuñas, posicionadores, colchones especiales, etc.
- Dele a su bebé bastante Tiempo boca abajo cuando está despierto y alguien lo está mirando. El tiempo boca abajo ayuda a desarrollar la fuerza y a evitar cabezas planas.
- Las mujeres embarazadas deben recibir atención prenatal regular; evitar el consumo de alcohol y drogas durante el embarazo y después del nacimiento; y Amamantar bebé.