La depresión materna no tratada puede afectar negativamente el embarazo y aumentar el riesgo de aborto espontáneo, bajo peso al nacer, pequeño para la edad gestacional, hipertensión y aumento de los síntomas depresivos. La depresión materna también puede afectar negativamente al recién nacido y aumentar el riesgo de un vínculo deficiente, mala alimentación y retrasos en el desarrollo.

¿Puedo tomar antidepresivos durante el embarazo?

Muchos medicamentos para la depresión y otras afecciones del estado de ánimoa se pueden usar de manera segura durante el embarazo y la lactancia. Las mamás embarazadas y que amamantan deben hablar con su médico antes de cambiar o suspender cualquier medicamento, no usen antidepresivos. Suspender bruscamente estos medicamentos puede causar efectos secundarios graves, como mareos, vómitos, problemas para dormir, pesadillas, temblores e irritabilidad.

Cada embarazo saludable tiene una línea de base de un riesgo de 3% a 5% de tener un bebé con un defecto congénito. Hay muchos estudios sobre el uso de antidepresivos ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina) durante el embarazo. Algunos de esos medicamentos incluyen sertralina, fluoxetina y citalopram. Si se analizan todos esos estudios en conjunto, no es probable que el uso de ISRS durante el embarazo aumente el riesgo de defectos congénitos u otros resultados desfavorables, por lo que pueden tomarse durante el embarazo. Es posible que la mamá necesite aumentar su dosis de antidepresivo para ayudarla a permanecer estable durante el embarazo.

¿Qué pasa con la lactancia materna y los antidepresivos?

Para las mamás que están amamantando, los antidepresivos pueden pasar a la leche en pequeñas cantidades, pero no se espera que causen problemas al bebé. La investigación muestra el desarrollo normal de esos niños en comparación con los programas de desarrollo cuando la madre tiene depresión no tratada. Si la mamá se siente triste, deprimida, desesperada o ha perdido el interés en hacer cosas, puede hablar con su médico o con el pediatra del bebé para obtener ayuda.